Todos los viernes aprendemos y disfrutamos de catas guiadas, con la participación de auténticos maestros que representan a cada bodega auspiciante. Así pasan por la vinoteca grandes especialistas de nuestro gran país vitivinícola que bien saben deleitarnos con sus saberes y experiencia.
En general acompañamos la degustación con empanadas, asado, y otros platos criollos de Argentina, buscando los maridajes más conocidos o innovadores. Siempre con reserva previa y mesas compartidas, estas charlas con degustación son un espacio de auténtica exploración de los sentidos: para encontrarnos con el vino de otra manera, conocer novedades y aprender sobre percepción y maridaje, sin que falte algo tan importante como es saber compartirlo.
Y dos veces al año, en otoño y en primavera, celebramos a lo grande. Son ya legendarias las Ferias de la vinoteca. Con más de 20 bodegas nacionales en exposición y una amplia variedad de vinos para degustar, todo el jardín transformado para la ocasión y el amigable menú criollo. La propuesta es recorrer libremente y degustar vinos que estén fuera de nuestra cotidianeidad. Por eso las ferias son verdaderas fiestas del vino.